Los hábitos son los principales pilares que te llevarán a la prosperidad en las finanzas de la familia. Para formar estos hábitos hay pasos pequeños pero importante que hay que hacer dias tras dias. Aqui te dare 11 pasos que te llevaran a las riquezas en las finanzas personales.
1. Maneje sus finanzas del hogar como si fuera un negocios
2. Evite pagar intereses
3. Evite usar el su fondo de emergencias
4. De vez en cuando recompense
5. Asegure sus finanzas
6. Negocie todo
7. Optimize sus oportunidades de inversion
8. Siempre compare precios
9. No compita con sus vecinos o familiares
10. Evite ser frugal solo para crecer su patrimonio (valor neto)
11. Aprenda a vivir, no vivas de mes a mes.
Articulo original de:
www.Gestion.org para ver el artículo completo.
Las nuevas tecnologías nos han permitido hacer muchas de nuestras tareas diarias más fáciles y rápidas. Los ordenadores y smartphones han sustituido y mejorado muchas de nuestras actividades y ya son el instrumento con el que millones de personas realizan sus compras diarias, hacen sus reservas o incluso se comunican.
La banca electrónica nos permite acceder a un sistema específico de nuestro banco desde nuestro ordenador, smartphone o tablet y realizar aquellas operaciones que hasta ahora solo hacíamos in situ, en un cajero o a través del teléfono. Para ello, las distintas entidades han creado plataformas específicas a las que se accede con un nombre de usuario y una contraseña que se deben solicitar en una oficina física.
Este es el sistema que utilizan los bancos para garantizar la seguridad de las transacciones electrónicas de sus usuarios, algo que preocupó mucho cuando se tuvo noticia de estas mejoras.
Para operaciones como transferencias, se activa el protocolo de autenticación que consiste en el envío de unas coordenadas que en la tarjeta que solicitamos con el alta del servicio corresponde a un número de dígitos variables según la entidad.
El primero, es el envío de un sms al teléfono particular del usuario. El segundo, es el envío de coordenadas que solo corresponden a su tarjeta de coordenadas personal. Este doble criterio se utiliza para evitar robos o desajustes en la cuenta.
Aunque en principio la banca electrónica se concibió para utilizarse desde un PC con acceso a internet, las diferentes entidades han creado apps para smartphones y tablets que faciliten el acceso al servicio desde cualquier lugar y en cualquier momento. Estas aplicaciones incorporan interfaces muy intuitivas y tienen la ventaja de que guardan el usuario y la contraseña para todas las entradas en el servicio, aunque por supuesto mantienen el proceso de autenticación por coordenadas.
Las ventajas del uso de la banca electrónica son innumerables. Primero, nos encontramos con la sencillez de sus operaciones, que podemos realizar desde cualquier dispositivo con conexión a internet. Su sistema de seguridad también nos garantiza que nuestras operaciones están a salvo y que se realizarán sin incidencias.
Por último, nos permite tener un contacto más directo con nuestra entidad bancaria, y nos evita largas colas o esperas en las oficinas físicas. Esto incluso beneficia a las propias entidades que agilizan los trámites.
Casi todas las entidades bancarias disponen actualmente de banca electrónica.
En los Estados Unidos, lo normal es que tengas que dejarle una propina al mesero de un restaurante, aunque no lo exija ninguna ley. Hay monto habituales que debes dar a cambio de un buen servicio. En otros países, las reglas sobre las propinas pueden variar mucho. No obstante, siempre es bueno hacerle saber a tu mesero si hizo un buen trabajo.
En los Estados Unidos, debes dejar una propina del 15 por ciento, por lo menos. La línea de base para el monto de la propina que debes dejarle a un mesero al comer en un restaurante en Estados Unidos es de al menos el 15 por ciento. Sin embargo, por lo general a este porcentaje se le considera el mínimo. Si solo dejas eso, es probable que el mesero se sienta muy ofendido.
Ten en cuenta que dar una propina del 15 por ciento será, para algunos meseros, algo parecido a afirmar que el servicio fue solamente promedio o regular. Considera la posibilidad de dejar una mejor propina si crees que el servicio fue superior al promedio.
Considera la posibilidad de dejar una propina del 20 por ciento si el servicio fue bueno, del 25 por ciento si el servicio fue excelente y del 30 por ciento si el servicio fue extraordinario.[1]
Algunas personas creen que también podrías dejar 2 dólares de propina por cada persona en la mesa si esa cantidad supera al monto que equivaldría calcularla por medio de porcentajes
Utiliza matemáticas para calcular la propina. Algunas personas tienen dificultades para calcular el 15 por ciento de manera exacta. Puedes utilizar un método matemático abreviado sencillo para determinar la cantidad que debes dejar.
Para calcular la propina, tendrás que hacer una ecuación matemática sencilla. Algunos sugieren redondear la cuenta a los US $ 10 más cercanos antes de calcular la propina.[2]
Mueve el punto decimal a la izquierda en la cantidad final de la factura. Ese es el 10 por ciento. Entonces, si tu cuenta es de 55 dólares, el 10 por ciento es 5,50 dólares. Para obtener el 15 %, calcula la mitad de 5,50 dólares y asúmela a los 5,50 dólares. Por lo tanto, el 15 por ciento sería 8,25 dólares.
Para calcular el 20 por ciento, desplaza el punto decimal en el monto de la cuenta a la izquierda y finalmente redondea. Por ejemplo, 35,84 dólares se convertirían en 3,58 dólares. Recuerda que ese es el 10 por ciento. Luego, duplica este número para obtener el 20 por ciento.
Revisa si la propina ya está incluida. En algunas circunstancias, la propina vendrá incluida en la cuenta. En estos casos, no es necesario volver a dejar propina.
Por lo general, la propina será del 15 o el 18 por ciento si no se incluye automáticamente. Algunos restaurantes tienen la regla de que la propina debe incluirse automáticamente si el grupo de comensales es muy grande. En estos casos, aparecerá “propina incluida” en la cuenta o en el menú.
Esto se hace porque si una o dos personas en el grupo deciden escatimar en la propina, lo más probable es que el mesero no reciba el monto mínimo.
Los grupos grandes demandan mucho tiempo y trabajo. Debes preguntar por adelantado o consultar en la página web del restaurante para saber si la propina está incluida.
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Dominar las reglas sobre propinas
Deja propinas para otros miembros del personal del restaurante. Si el mesero no es la única persona que te ha brindado algún tipo de atención, es común dejarle propina también a los demás trabajadores.
Por ejemplo, si has recibido el beneficio del servicio de un sumiller, se acostumbra dejarle una propina del 15 por ciento del precio de la botella de vino.
Puedes dejarle al encargado del guardarropa una propina de aproximadamente de 1 dólar por abrigo o 2 dólares al encargado del servicio de aparcamiento o de la cochera, si dejaste tu auto bajo su cuidado durante la cena. Puedes dejarle una propina más pequeña a tu mesero si la comida se sirve en forma de bufete o si él solo te trae las bebidas, pero de todos modos debes darle una propina de entre 10 y 15 por ciento.
Algunos restaurantes tienen asistentes de aseo; puedes dejarles una propina de 0,5 a 1 dólar. Es posible que también quieras dejarle una propina aparte al mitre. Cuando vayas a comprar algo de un mostrador, por ejemplo, un café por la mañana, normalmente no se acostumbra dar propina.
Utiliza una aplicación para calcular propinas. Puedes descargar aplicaciones en tu teléfono inteligente que calcularán la propina si insertas el importe de tu cuenta.
La mayoría de los teléfonos inteligentes también vienen con una calculadora, lo cual te permitirá calcular la propina por tu cuenta, dependiendo de la cantidad que desees dejar.
Existen varios sitios web que pueden calcular la propina por ti. Todo lo que tienes que hacer es insertar el importe de la factura y el porcentaje que quieres dejar de propina.[3]
En algunos estados, el impuesto sobre las ventas es de 5 por ciento. Si ese es el caso, puedes multiplicar el impuesto sobre las ventas que aparece en la cuenta por 3 para obtener el 15 por ciento.
Si has utilizado cupones o te han hecho algún descuento, calcula la propina en función de lo que hubieses pagado normalmente. De lo contrario, vas a castigar al mesero por los esfuerzos de la administración del restaurante para atraer clientes.
Ten en cuenta la razón por la que es importante dejar propinas. Muchos meseros dependen totalmente de las propinas para sobrevivir. En primer lugar, el hecho de recibir propinas hace que sus salarios por hora sean más bajos.
Es común que los meseros ganen solo un poco más de 2 dólares por hora antes de la propina. A menudo, su salario total está muy por debajo del salario mínimo. Aunque los diferentes estados tienen salarios mínimos diversos, el salario federal mínimo para los trabajadores de restaurantes que reciben propinas es de solo 2,13 dólares.[4]
Algunos meseros también están obligados a compartir o juntar sus propinas al final de la noche o a contribuir para reunir las propinas de los bármanes, lo cual reduce sus ganancias totales.
No estás obligado legalmente a dejar propina; sin embargo, será muy injusto para el mesero si no lo haces.[5]
Deja una propina pequeña si el servicio fue muy malo. Portarse como un tonto no tiene nada de bueno, pero si realmente recibiste un servicio terrible, no debes sentirte obligado a dejar una propina completa.No obstante, trata de hablar con el mesero antes para comunicarle lo que te incomoda y darle la oportunidad de arreglarlo. Una propina sirve para reconocer un buen servicio.
Si el mesero te ignoró, tuvo una mala actitud o te sirvió la comida muy tarde, es aceptable no dejar propina completa. Evalúa si la comida que te trajeron coincidió con tu pedido, si estaba caliente y fresca, qué tan atento era el mesero, qué tan rápido retiró los platos vacíos y si era cortés.
Es posible que quieras explicar la ausencia de propina, en términos agradables y constructivos, en la boleta, cuando pagues la cuenta. Algunos creen que debes dejar por lo menos 10 por ciento, incluso si has recibido un mal servicio.[6]
Ten cuidado al determinar si el mal servicio en realidad fue culpa del mesero. Por ejemplo, es posible que los cocineros no le hayan entregado a tiempo la comida al mesero o que la administración haya hecho recortes de personal.
Si el servicio fue excelente, díselo a tu mesero. Puedes hacerle el día al mesero si le dices que piensas que su servicio no solo fue bueno, sino impecable. ¿Por qué no?
Escribe una nota pequeña en la boleta al pagar la cuenta para explicar lo que, en tu opinión, el mesero hizo muy bien.
Mejor aún, llama al gerente y háblale sobre el buen trabajo que hizo el mesero.
Siempre debes tratar al mesero con una sonrisa y ser amable y cortés. Los trabajos en los que se debe servir a otras personas pueden ser muy estresantes, así que no es necesario descargar un mal día en el mesero.
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Dejar propinas en otros países
Asegúrate de que se acepten propinas. En la mayoría de los establecimientos en Estados Unidos, no solo se aceptan propinas, sino que se anima a los clientes a dejarlas porque los meseros dependen de ellas para ganar el dinero suficiente para sobrevivir. En algunos otros países, las propinas pueden considerarse insultantes o, simplemente, no se aceptan.
Hay algunos lugares donde no se permite dejar propinas. Por ejemplo, algunos complejos recreationales en el Caribe con todo incluido, pueden desanimarte de dar propinas debido a que la tarifa de servicio ya está incluida en el costo total de las vacaciones.
Si vas a asistir a una reunión grupal que otra persona ya pagó por adelantado, como por ejemplo, una boda, es posible que la persona que ha pagado el evento ya haya cubierto el costo de la propina.[7]
No obstante, dejar una propina adicional en una situación como esa no tiene nada de malo, si puedes darte el lujo de hacerlo. Es probable que el mesero lo aprecie.
En Europa, debes dejar propinas solo de vez en cuando. La cultura sobre las propinas en Europa no es la misma que en los Estados Unidos, ya que, en este país, dejar propinas es algo que se espera normalmente, pero en Europa es todo lo contrario.[8]
Empieza por revisar la carta del restaurante para saber si el servicio está incluido. Si no es así, podrías dejar entre 5 y 10 por ciento. Dejar una propina más grande se puede considerar excesivo o inusual en algunos países.
La diferencia es que los meseros en Europa a menudo reciben un mejor salario que los meseros en Estados Unidos, lo que significa que dependen mucho menos de las propinas para sobrevivir, y son propensos a considerarlas como un bono pequeño e inesperado.
Es una buena idea darle la propina al mesero en lugar de dejarla sobre la mesa. Es posible que veas una propina opcional del 12,5 por ciento en algunas cartas en Londres.
Deja propinas de manera inteligente en otras partes del mundo. Las costumbres de dejar propinas varían mucho dependiendo del país que visites. Es una buena idea investigar las prácticas del país antes de partir.
En el Medio Oriente, la propina será bien recibida inclusive si es pequeña. Algunos gobiernos, como Dubai, exigen un recargo del 10 por ciento en las cuentas de los restaurantes. En Egipto, la propina a menudo se incluye en la cuenta, pero se puede añadir un 5 a 10 por ciento adicional.
En Israel y Jordania, la propina generalmente va incluida en la cuenta.
Canadá se parece a los Estados Unidos en este aspecto, por lo que la propina será del 15 al 20 por ciento.
En algunos países sudamericanos, como Chile, se incluye una propina del 10 por ciento en la cuenta.
En México es preferible usar dinero en efectivo y la propina debe ser del 10 al 15 por ciento.
El robo de identidad se produce cuando alguien usa su número de Seguro Social u otra información personal para abrir cuentas nuevas, hacer compras o conseguir un reembolso de impuestos.
La mayoría de la gente que sufre un robo de identidad debe seguir varios pasos para recuperarse. RoboDeIdentidad.gov, es el recurso centralizado del gobierno federal que lo ayudará a reportar el robo de identidad y recuperarse de este delito. El sitio ofrece consejos para seguir paso a paso y útiles recursos como listas de verificación fáciles de imprimir y modelos de cartas.
Si cree que alguien está usando su información personal, visite RoboDeIdentidad.gov.
Signos de advertencia
Usted podría descubrir que alguien está usando su información de varias maneras. Podría recibir un aviso del IRS o encontrar cuentas desconocidas en su informe de crédito. Podría notar extracciones de dinero anormales en su cuenta bancaria, recibir facturas que no le pertenecen, o recibir llamadas sobre deudas que usted no contrajo.
¿Qué hacer inmediatamente?
Si observa uno de estos signos de advertencia de robo de identidad, actúe rápidamente. Estos pasos lo ayudarán a limitar los daños. El sitio RoboDeIdentidad.gov lo guiará a través de cada paso.
Llame a las compañías donde sabe que se produjo el fraude.
Coloque una alerta de fraude en sus informes de crédito y obtenga copias de su informe.
Reporte el robo de identidad ante la FTC.
Presente una denuncia en su departamento de policía local.
Luego, respire hondo y empiece a reparar el daño. Dependiendo de su situación, su próximo paso podría ser cerrar las cuentas abiertas bajo su nombre, o reportar los cargos fraudulentos a su compañía de tarjeta de crédito. RoboDeIdentidad.gov lo puede ayudar — cualquiera sea su situación específica de robo de identidad.
Si pierde o le roban su información
¿Recibió recientemente un aviso que dice que su información personal quedó expuesta como resultado de un incidente de seguridad de datos? ¿Perdió su cartera? ¿O se enteró de que le piratearon una cuenta en línea? Dependiendo del tipo de información que se haya perdido, hay pasos que puede seguir que lo pueden ayudar a protegerse contra el robo de identidad.
Cómo proteger su identidad
Si bien el robo de identidad es algo que le puede pasar a cualquiera, hay algunas cosas que puede hacer para reducir su riesgo. Estas son cinco maneras de incorporar la protección de su identidad a su rutina diaria:
Lea atentamente y con frecuencia los resúmenes de su cuenta bancaria y tarjeta de crédito.
Esté atento a las fechas de vencimiento de sus pagos. Si su factura no llega en la fecha habitual, averigüe qué sucedió.
Lea los resúmenes de su plan de seguro de salud. Controle que sus reclamaciones se correspondan con la atención médica que recibió.
Triture todos los documentos que contengan información personal y financiera.
Revise cada uno de sus tres informes de crédito por lo menos una vez al año. Para solicitar sus informes gratuitos, visite annualcreditreport.com.
Para más recomendaciones preventivas — y para acceder a recursos que puede compartir con otras personas — visite ftc.gov/robodeidentidad.
Tenemos hoy una de la muchas historias de logros, que tu encontraras en el evento Hispancicize. Este evento Hispanicize es una plataforma para darle impulso a proyectos creativos, nuevas tecnologías, campañas de mercadeo, películas, libros y otros productos que puedan ser de interés para los latinos en los Estados Unidos y Puerto Rico.
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Les invito a que escuches el podcast de hoy donde Arturo Nava entrevisto a Felix A. Montelara, Autor y creador de este blog Potencial Millonario. Arturo Nava Mediante sus preguntas investigative lograr a exponer una historia de verdadero logros de la vida empresarial de Felix A. Montelara.
Felix A. Montelara hable del Ahorro, Inversiones en propiedades y el trabajo del día a día y la importancia de emprender.
Hoy les dejo estas notas sobre el ganador del premio noble de Economía escrito por Antonio Moreno-Torres Gálvez.
RICHARD H. THALER Y LA ECONOMÍA CONDUCTUAL
Por: El Premio Nobel de Economía de 2017 ha sido concedido al Profesor de la Universidad de Chicago Richard H. Thaler por sus contribuciones a la «Economía Conductual» –o, si se prefiere, «Economía del Comportamiento»-.
Según la nota de prensa emitida por la Real Academia de Ciencias sueca, con sus investigaciones sobre cómo laracionalidad limitada, las preferencias sociales y la falta de auto-control afectan sistemáticamente a las decisiones individuales, la óptica psicológica se ha incorporado definitivamente al análisis económico.
Lo que tiene un impacto profundo que no se limita solo a la investigación, sino que se proyecta a múltiples áreas aplicadas como las políticas públicas, el derecho o la empresa.
RICHARD H. THALER Y LA ECONOMÍA CONDUCTUAL
Con este galardón se convierte en mainstream un enfoque alternativo cuyo origen se encuentra en los trabajos pioneros de Herbert A. Simon (Premio Nobel de Economía de 1978), Daniel Kahneman (Premio Nobel de Economía de 2002), Amos Tversky (colaborador directo de Kahneman y Thaler, prematuramente fallecido en 1996) y el propio Thaler, culminándose así un proceso que este relata en su libro de 2016 titulado en su versión original en inglés «Misbehaving-The making of Behavioral Economics», en un juego de palabras con un doble significado que hace referencia tanto al núcleo de sus trabajos –la desviación del paradigma neo clásico de comportamiento racional optimizados como a la rebeldía en la que en los inicios fue declarado por el grueso de la comunidad científica.
Sobre la base de la tipificación de Kahneman de las decisiones en deliberadas (sistema cerebral de pensamiento lento en base a algoritmos) e intuitivas (sistema reptiliano depensamiento rápido en base a atajos de razonamiento heurísticas-), Thaler distingue entre los especímenes del economista ideal (econ) –el agente racional con preferencias coherentes y estables que busca un equilibrio resolviendo un problema de optimización restringida- y del humano real (human) –el agente con racionalidad limitada (en palabras de Simon) sometido a vulnerabilidades cognitivas y sociológicas-.
Así, si en la lógica del economista ideal –una suerte de androide- un acto de consumo en el mercado resulta en una utilidad de adquisición materializada únicamente en forma de excedente del consumidor -a calcular por diferencia entre la utilidad obtenida y el coste de oportunidad-, en la del humano real se considera una utilidad adicional de carácter transaccional –por ejemplo, la felicidad que nos generan los chollos- que viene dada por la diferencia entre el precio pagado y el precio que tuviera por referencia.
Esta importancia de las referencias y de los cambios respecto a las mismas –frente a los niveles- se manifiesta a menudo en querencias hacia la inacción –por aversión a las pérdidas-, diferentes valoraciones de un mismo bien o servicio en función de si se posea previamente o no, o en actitudes hacia el riesgo no predichas por los modelos estándar –como por ejemplo una mayor querencia hacia el mismo en situaciones desesperadas o cuando se pertenece a un grupo-.
Otro tipo de desviaciones con respecto a estos estudiadas por Thaler se refieren a las preferencias sociales que los agentes económicos desarrollan, en forma de actitudes altruistas o sentimientos de justicia, violando la presunción de egoísmo y alterando las predicciones clásicas en materia de acción colectiva, lo que da pie a lo que podía llamarse una «Teoría de Juegos Conductual». Preferencias que demuestran también estar relacionadas con las situaciones de partida, lo que pone en valor las disquisiciones filosóficas sobre la base del constructo del «velo de la ignorancia».
En el ámbito de la decisión inter temporal, las dos figuras citadas (human y econ) se convierten respectivamente
en las del planificador (planner) y el ejecutor (doer), en una dualidad metafórica que captura los típicos problemas de auto-control y falta de voluntad como los que sufre el estudiante que va demorando el comienzo del estudio -hasta que se topa con la fecha del examen sin estar preparado-, quien pospone la decisión de dejar de fumar –hasta que se encuentra con un grave problema de salud- o comenzar a ahorrar para la jubilación –hasta sufrir un problema financiero-, o quien sistemáticamente incumple sus propósitos de año nuevo.
Esta tensión, similar a la existente entre un principal y un agente, deriva en una inconsistencia, ilustrada por Thaler con el símil de un telescopio defectuoso, que formalmente exige la adopción de un modelo de descuento de utilidad hiperbólico en matización del exponencial de Samuelson habitualmente utilizado para capturar nuestra impaciencia.
Uno de los campos en los que Thaler ha tenido contribuciones relevantes es el de las «Finanzas Conductuales», ya acreditadas como disciplina desde que en 2013 se concediera a Robert J. Shiller el Nobel de Economía, en un premio aparentemente contradictorio al haber sido compartido con Lars Peter Hansen –experto en análisis empírico de mercados- y -relevantemente para esta nota- con Eugene F. Fama, compañero de claustro de Thaler con quien ha venido manteniendo una confrontación amistosa –suelen jugar juntos al golf-.
Frente a la hipótesis de eficiencia de mercado -que implica su imbatibilidad y la unicidad o fundamentalidad
de los precios en condiciones de información perfecta- que defiende Fama, en el enfoque conductual se reconoce el papel de las emociones –o como decía Keynes, los «espíritus animales» (animal spirits)- que se manifiestan en forma de confianza excesiva, euforias, contagios, espirales o miopía cortoplacista.
Esta «exuberancia irracional» -cuño popularizado por Shiller, aunque es original del presidente de la Reserva Federal Alan Greenspan- se traduce en los precios en una componente de ruido que se añade a la intrínseca que ya recoge la información disponible, pudiendo resultar en burbujas cuya explosión siempre es perniciosa.
Desde el punto de vista práctico, esto legitima las estrategias prácticas de «dinero inteligente» (smart money) como la «inversión en valor» (value investing). Pero sobre todo, y según Thaler, una causa última tras estos hechos se encontraría en los problemas de racionalidad limitada que derivan en trampas como las de la «contabilidad mental» (mental accounting) -que atribuye a diferentes compartimientos estancos y etiquetados determinados presupuestos de gasto, rechazando por tanto una realidad tan incontrovertible como es la fungibilidad del dinero-, la de los costes hundidos (sunk costs) –por la que se tienen en cuenta en la toma de decisiones costes irrecuperables por haberse ya incurrido en ellos, lo que es incoherente si se es consecuencialista-, o la de la sensibilidad del decidor a cómo se le presenta la información (framing) –así, no es lo mismo suprimir un descuento sobre un precio que añadir un recargo al mismo, aún terminando en el mismo punto-.
En «Misbehaving», Thaler cuenta cómo la sospecha hacia sus averiguaciones y teorías le han hecho vivir
con la sensación de ser un renegado en constante disputa –que visualiza como un torneo medievalcontra unos detractores militantes en la ortodoxia micro económica, que defienden los mercados como mecanismo de incentivación, aprendizaje y disciplina para el soslayo de los problemas cognitivos y conductuales, dudando de la validez universal de las inferencias realizadas a partir de experimentos de laboratorio realizados en condiciones controladas. Por el contrario, y renunciando a la descripción positiva de la toma de decisiones en el mundo real, confían en el valor de sus modelos –compactos, relativamente sencillos e indiscutiblemente elegantes- de naturaleza axiomática, con el argumento de que, aun reconociendo lo artificioso que resulta imaginar a los individuos buscando la tangencia de una restricción presupuestaria con una curva de isoutilidad o a las empresas igualando costes e ingresos marginales, la aceptabilidad general de las predicciones que así resultan sugiere que lo que subyace es una toma de decisiones ejecutada “como si” (as if) esta fuera cosa de agentes racionales optimizadores en busca de un equilibrio en los términos descritos.
Todo lo anterior aún a costa de olvidar que muchas decisiones importantes en la vida son complejas –por lo que se verán de seguro afectadas por la racionalidad limitada- y de tracto único -por lo que no existe posibilidad de
aprendizaje alguno-.
El otro libro popular de Thaler es «Nudge-Improving decisions about health, wealth, and happiness», en el que junto con el jurista Cass R. Sunstein -actual profesor de la Universidad de Harvard- propuso en 2008 una aproximación a las políticas públicas, el «Paternalismo Libertario», basada en la actuación sobre factores presuntamente irrelevantes de la arquitectura de decisiones para “empujar” así sutilmente a los agentes
apartándolos de los sesgos y disfunciones de naturaleza psicosocial por los cuales se ven negativamente afectados, lo que pudo llevar a la práctica como impulsor del Behavioural Insight Team-BIT del Reino Unido -hoy en día una potente consultora participada por el Gobierno-.
Aunque aparentemente inocente en su filosofía, hay quienes detectan en la misma cierta hipocresía –se presume al regulador una superioridad y una infalibilidad que se discute en el regulado- y una manipulación poco ética al rozar en ocasiones la coercion encubierta.
El recurso a experimentos de campo y el uso intensivo de datos son parte nuclear de este nuevo enfoque,
que en ámbitos como las políticas de desarrollo comienza a ser más que relevante. En terrenos ya menos explorados, Thaler reclama y pronostica una mayor presencia de la óptica conductual en la Macro-economía, sin que pueda aducirse como coartada el que en esta existan numerosas y diferentes aproximaciones positivas y normativas, a diferencia de la Micro-economía, en la que existe consenso sobre lo que constituye su núcleo y sobre el valor normativo de este.
Termina por puntualizar, como sus principales recomendaciones prácticas para la definitiva consolidación de suspropuestas, la importancia de la observación, de la recopilación de datos y, dado que se desenvuelven en
el mundo de las ciencias sociales, y por elemental que parezca, la de la comunicación abierta en evitación
de sobreentendidos y malentendidos.
En un guiño que es una muestra más de su sentido del humor, el Profesor Thaler declaró al enterarse de la concesión del premio que dedicaría el dinero “del Nobel” a gastarlo “en ocio” (nótese los etiquetados del origen y la aplicación del premio monetario, tan propios de la contabilidad mental) y “tan irracionalmente como sea posible”.
“El dinero no puede comprar la felicidad” es algo que escuchamos desde pequeños y aparentemente es una máxima que nadie, en su sano juicio, puede cuestionar. Pero según un nuevo estudio de la escuela de negocios de la Universidad de Harvard, el “vil metal” realmente puede llegar a ayudarnos a llevar adelante una vida más plena.
Según los científicos involucrados, todo depende de cómo se lo gaste. Los hallazgos de la encuesta en la que participaron 6.000 adultos de los Estados Unidos, Canadá, Dinamarca y los Países Bajos indicarían que todo billete invertido, no en bienes materiales sino en ganar tiempo libre, colaborará indefectiblemente en hacernos más felices.
Por ejemplo, contratar a una empleada doméstica para que ayude con la limpieza del hogar o con la preparación de las comidas liberará tiempo que de otra manera dedicaríamos a realizar tareas que no deseamos o disfrutamos hacer, todo con la finalidad de que pueda ser dedicado a las actividades que generan placer y por ende, felicidad.
“Las personas que contratan a alguien para que limpie o le pagan al hijo del vecino para que pode el césped, pueden sentirse un poco haraganas”, dijo la Dra. Ashley Whillans, profesora asistente de la escuela de negocios de Harvard y autora a cargo del estudio. “Pero nuestros resultados sugieren que comprar tiempo produce efectos similares sobre nuestra felicidad a tener más dinero” agregó.
La Psicología del dinero | Ep 224 Potencial Millonario por Felix A. Montelara en Audio Dice Network en Español (Spanish)
Original de T. Rowe Price
La encuesta Parents, Kids & Money Survey de T. Rowe Price 2017, que encuestó a 1,014 padres de niños de 8 a 14 años a nivel nacional y sus hijos, analizó las actitudes y comportamientos de los padres que estaban asociados con los hábitos financieros de los niños.
La encuesta descubrió que las conductas y expectativas monetarias positivas entre los niños a menudo se asocian con la decisión de los padres de dejar que sus hijos decidan cómo ahorrar y gastar su dinero por su cuenta, y modelar buenos hábitos financieros.
Por el contrario, los hábitos financieros preocupantes entre los niños se vieron con mayor frecuencia cuando los padres tienen una historia preocupante con el dinero.
“Los niños que tienen la libertad de administrar su propio dinero parecen tener mejores conductas monetarias y son más sinceros con sus padres sobre cómo se gastó su dinero”, dice Roger Young, planificador financiero sénior de T. Rowe Price y padre de tres hijos.
“Sé de primera mano la tentación de la crianza de helicópteros, pero hay evidencia de un inconveniente de este enfoque cuando se trata de dinero. Más de tres cuartas partes de los niños que manejan su propio dinero dicen que tienen conversaciones de dinero con sus padres. Darles experiencias de dinero de la vida real, saca las finanzas de lo conceptual y las pone en práctica.
“Sabemos que los hábitos con dinero de los niños se forman antes de llegar a la escuela secundaria y que sus padres son a menudo sus maestros más influyentes. No es sorprendente, que los padres con hábitos de dinero problemáticos parezcan pasarlos a sus hijos. Estos padres son golpeados con las dobles consecuencias de sus propios errores financieros y la posibilidad de que sus hijos puedan revivirlos.
“Para evitar esto, los padres pueden considerar discutir abiertamente sus finanzas con sus hijos: los buenos, los malos y los feos. Los niños que conocen de la bancarrota o quiebra de sus padres tienen más del doble de probabilidades de decir que son extremadamente inteligentes con respecto al dinero en comparación con aquellos que no lo sabían de la quiebra de sus padres (68% frente a 30%). Así que no creo que estén destinados a seguir los pasos de sus padres “, dice Young.
T. Rowe Price anima a los padres a invertir en el futuro de sus hijos hablándoles semanalmente sobre cuestiones de dinero. La encuesta encontró que los padres que hablan de temas financieros con sus hijos al menos una vez por semana tienen una probabilidad significativamente mayor de tener hijos que dicen ser inteligentes con respecto al dinero (64% frente a 41%). Los temas frecuentes que los padres han usado para iniciar conversaciones sobre dinero han incluido:
• Compras de regreso a la escuela con un presupuesto (47%)
• Calculando cuánto se ahorró comprando artículos de venta (45%)
• Entrar en un banco físico (41%)
• Discutir el costo de la universidad (41%)
• Discutir por qué no tomaron vacaciones más grandes (34%)
Para ayudar a los padres a tener conversaciones de dinero, la empresa creó MoneyConfidentKids.com, que ofrece juegos gratuitos en línea para niños; consejos para los padres que se centran en conceptos financieros tales como el establecimiento de metas, el gasto versus el ahorro, la inflación, la asignación de activos y la diversificación de inversiones; así como lecciones para educadores.
Ciudades con alto nivel de deuda por tarjetas de crédito
Informacion basada en data de CNBC.com
Metropolitan Area Average credit card balance MedianIncome
Washington D.C. $7,442 $46,536
Tampa-St. Petersburg $6,204 $30,830
St. Louis $6,203 $32,674
Seattle-Tacoma $6,720 $40,482
San Francisco-Oakland-San Jose $6,533 $44,304
San Diego $6,848 $32,656
San Antonio $7,070 $29,124
Riverside-San Bernadino $5,829 $28,533
Portland, OR $6,120 $32,050
Phoenix $6,422 $31,744
Philadelphia $6,693 $36,962
Orlando-Daytona Beach-Melbourne $5,984 $28,044
New York $7,145 $38,951
Minneapolis-St. Paul $6,036 $38,067
Miami-Fort Lauderdale $6,615 $28,396
Los Angeles $6,632 $30,944
Houston $7,121 $33,244
Detroit $5,889 $31,921
Denver $6,720 $37,049
Dallas-Fort Worth $7,171 $33,621
Chicago $6,649 $35,329
Charlotte $6,296 $31,896
Boston $6,455 $40,935
Baltimore $6,985 $41,241
Atlanta $6,907 $32,658